De Ringuelet a la pantalla de Canal 13
Luisa se sumergió en el mundo de la costura a los 15 años y ahora, casi tres décadas después se presentó diciendo “hago lo que me pidan, hago lo que me pidan. Mi gran desafío es crear desde mi propia inventiva y para eso estoy acá”, le dijo a la conductora Andrea Politti.
Su fuerte en el rubro costura es hacer trajes de patín, de danzas, uniformes escolares y buzos para los egresados, pero su llegada a Canal 13 persigue una meta bien clara “En el programa quiero mostrar la alta costura que hago, porque es una manera de darme a conocer y poder tener más clientes, aunque a decir verdad, trabajo no me falta”, dijo.
La costurera de Ringuelet dijo que su participación en Corte y Confección se dio casi por casualidad. “Mis amigas vieron el programa y me propusieron que me anotara. Decían que yo tenía que estar ahí y desde el primer momento fueron ellas las que me alentaron. Un domingo en el taller, hicimos un video muy casero y lo presentamos, pero sin tener demasiada confianza de que íbamos a tener éxito con nuestra filmación, porque era muy rudimentaria. Me sorprendí muchísimo cuando me llamaron para el casting. La verdad que no lo podía creer”, dice Luisa Baiza.
Más adelante dijo que luego de presentarse en el casting tampoco tenía mucha fe de ser convocada, porque además de llegar tarde, fue la primera en terminar la labor encomendada. Pero 10 días más tarde, el teléfono sonó y era la producción del programa, para avisarle que había sido seleccionada junto a otros 15 aspirantes para protagonizar la segunda temporada. Recordemos que la primera temporada del programa en el canal de Constitución resultó exitosa y arrojó como ganador a Gerardo Casas, un talentoso diseñador que anteriormente había incirsuinado en el mundo del boxeo. Fabián Zitta; Verónica de la Canal; Benito Fernández, constituyen el exigente jurado que programa a programa puntúan los diseños elaborados por los participantes. Semana a semana, uno de los participantes queda en el camino y se va del programa.
“Me dedico... a hacer de todo”, explicó Luisa, quien trabaja ligada con el cliente. Si bien, el fuerte de su labor es lo señalado anteriormente, también incursiona en la alta costura, pero su nombre no tiene la suficiente promoción como para captar una clientela mayor. Sin lugar a dudas, este paso por la televisión servirá, para que su nombre explote en todo el ámbito platense.
“Mi meta en el programa es mostrar la alta costura que hago, porque muchos no me tienen fe”, asegura. Y agrega que desde que empezó a participar del programa disfruta de todo e incluso puede sortear sin problemas los límites temporales que impone el ritmo televisivo. “Estoy acostumbrada a trabajar con el cliente encima y los tiempos limitados, porque gracias a Dios tenemos trabajo y trabajamos siempre al límite. Estoy como en casa en el programa y aprendiendo muchísimo, estoy con personas muy grosas como Benito Fernández, Verónica de la Canal, Fabián Zitta y Matilda Blanco. Es un placer trabajar con esta gente”, explica.
Con respecto a la rutina diaria, reconoce que se le complicó “un poco, un poco mucho”: son dos horas de viaje para ir y dos para volver, sumado a las horas que tome la grabación del programa. “Pero obviamente yo ya sabia esto. No estoy acostumbrada y la adaptación es difícil, a veces muy difícil”, plantea. Sin embargo, el trajín diario no le impide seguir metiéndole tiempo y energía a su taller Baizluis, ubicado en 1 entre 517 y 518: “Estoy acostumbrada, hace 28 años trabajo sola y por mi cuenta. Tengo pedidos hechos antes de esto y por eso sigo como si nada hubiera pasado”, cierra.
En las primeras semanas de la competencia, los distintos desafíos planteados por el programa, fueron resueltos favorablemente para la participante de Ringuelet y eso le permitió sumar puntajes altos y evitar las tensionantes competencias de eliminación.
Tal vez a Luisa le falte una mayor desenvoltura o una historia atrapante frente a las cámaras, como para que su participación alcance el interés equiparable con sus trabajos, como para asegurarse una permanencia dentro del certámen. Algo así como en el “bailando” que vale más la “previa” que la habilidad mostrada en la pista.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario