Miradas equivocadas
en tiempos difíciles
Por Julián Andrés Mango
Es increíble como en una ciudad con más de 700.000 habitantes en plena pandemia se vea tanta negligencia junta. Tanto por parte de los ciudadanos como del municipio. Una ciudad que cumplió el aislamiento tan solo los primeros días. Pero con el correr de las semanas empezaron a surgir casos de coronavirus en diferentes barrios hasta llegar a los 60 contagios y con varios casos sospechosos.
Aunque el caso más sospechoso en esta pandemia sea el propio intendente de la localidad el que mire hacia otro lado, quien hace tiempo está pidiendo la apertura económica y la vuelta a la libertad. Un descuido hacia sus conciudadanos que podría generar más casos fatales en nuestra región.
La Plata tiene una zona céntrica con gran parte de locales abiertos, los cuales están con las persianas totalmente abiertas y están muy lejos de la modalidad de venta online. También se pueden observar a los ya famosos “arbolitos” manejándose a sus anchas en plena calle 7, una actividad ilegal que parece haberse arraigado y que hoy día es una de las postales que presenta nuestro centro comercial platense.
Los mismos fueron detenidos el pasado 7 de mayo por la Policía Federal en un megaoperativo que incauto más de 4 millones de pesos. Pero si hoy va a ver se va a dar cuenta que ellos ya están en actividad nuevamente. La escasa cantidad de controles vehiculares ha generado que muchos vecinos se permitan salir mucho más lejos que los 500 mts autorizados por el gobierno. Cabe destacar que la ciudad es parte de la red AMBA y que según el Estado Nacional debemos mantener el aislamiento en la fase anterior.
Quedamos exentos de esta nueva fase de la cuarentena porque presentábamos casos confirmados y activos. Y aun hoy esos casos siguen en un ascenso que ya parece incontrolable.
Es de vital importancia que la ciudadanía tome conciencia y evite un rebrote mayor de este virus que mantiene en vilo a la localidad. Al hablar de cuidarnos estamos hablando de mantener la distancia entre personas, el uso de barbijos o tapa bocas y la constante higienización de nuestras manos ya sea con agua y jabón como alcohol en gel.
Estas medidas preventivas evitan que el virus ingrese en nuestros hogares. Evitando así que nuestros seres queridos que se encuentren en zona de riesgo puedan padecer la enfermedad.
Tanto como la cuarentena ha mostrado falencias en nuestros vecinos y funcionarios también se han visto situaciones meritorias de un aplauso masivo. Casos tales como referentes, clubes barriales, organizaciones y personas que por su cuenta están trabajando de manera incondicional para llevar un plato de comida a los más necesitados. Es muy gratificante saber que siempre hay gente con el corazón tan grande en momentos tan difíciles nunca dejan de pensar en los y las que menos tienen.
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